lunes, 18 de septiembre de 2017

De vuelta

Y de nuevo aquí, en la red, haciéndome un rinconcito para escupir mis debilidades. Quién me hubiera dicho, tras años de dejar atrás el convertir en palabras cada pensamiento y cada sentimiento que volvería de nuevo a necesitarlo tanto. Y es que todos estos años acumulandolo todo, sin sacarlo, hace mella. Y la necesidad vuelve.

Pero comienzo de cero. Otro nombre, otro blog. No porque también sea una nueva persona, no. Sigo siendo la misma chica solitaria que vio aquí un lugar donde buscar la calma, un sitio donde poder contarlo todo, abiertamente, sin mentirse a sí misma. Porque cierto es que cuando piensas en contarle algo a alguien todos tenemos esa mala costumbre de adornarlo ligeramente algunos, completamente otros, pensando en hacer parecer otra cosa a esa persona cuando en realidad nos mentimos a nosotros mismos. Porque suceden cosas que nos avergüenzan, atemorizan o nos ridiculizan de tal manera que necesitamos sacarlo de la mente, o del corazón, pero en una versión más light, menos doloroso, con adornos que jamás existieron para que con el tiempo terminemos creyendo que fue así. Y vivimos con nuestras mentiras a modo de airbag, para que el golpe de la realidad no nos deje tumbados en la calzada sin poder levantarnos. Y seguimos caminando. Más felices, más tristes, más indiferentes. Pero seguimos.

Y aquí está este rinconcito. Donde no tienes que dar una imagen ante alguien. Una imagen de lo que eres, de lo que no te gusta, sin necesidad de adornos. Porque nadie lee, nadie te pone cara, nadie sabe que la chica solitaria que escribe aquí es la que a diario te cobra en la caja del súper o la que conduce el autobús que te lleva al trabajo, esa que da otra imagen, de que todo le va bien, que es feliz con su vida, que sonríe porque realmente le apetece.

Y aquí está mi rinconcito. Donde hablar conmigo misma cuando no tenga a nadie más, como si lo hiciera con alguien. Con sinceridad, con soledad, con tristeza, con lágrimas y con risas. En este momento en el que he llegado a trabajar de tal forma la habilidad de cortar con la gente o con ciertas situaciones antes de que me importen tanto como para que me llegue a doler. Distante con todos y ante todo. Con las ideas revueltas, sentimientos contrariados. Dudas. Sin consejo. Sin nadie para escucharte. Solamente las palabras que fluyen de mis manos, esas que se agolpan en mi mente cada día, queriendo salir. Y por eso vuelvo. Para sacarlo todo. El día a día.



Miss Black Widow.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

I´m Sorry

Desde aquí quiero decirte que lo siento. Me respondo tus preguntas. A mí misma, ya que a tí no pude respondértelas. No sé qué me pasa, pe...